15 de junio de 2024 por Julieta
Confiar en la rabia
Esta edición de las Olas explora los bloqueos y la potencia de nombrar nuestras experiencias en tiempos difíciles.
Te propongo una lectura difícil… y también abro debate acerca del dolor.
Te invito especialmente a leer, si alguna vez te pusiste a imaginar cómo sería una vida que cuide la dignidad ante todo.
¿Vos te sentiste bloqueadx alguna vez? ¿Cómo aparece el dolor en tus historias? ¿Cómo es para vos, ponerlo en palabras?
¡Bienvenida a las Olas!
la Espina Clavada
Un poco de contexto, desde donde escribo hoy.
El mantra de estos días en mi cabeza fue “estoy bloqueada-estoy bloqueada-estoy bloqueada”, como una serpiente que se muerde la cola. Así me sentí los últimos días, paralizada adelante de la compu, abriendo infinitas pestañas que iban a ninguna parte. Y acá estoy, todavía enojada de a ratos, o conmigo, o con la situación, no te voy a mentir. Pero escribo para mirar de cerca la espina que tengo clavada y por la cual no estoy caminando a donde me importa llegar.
¿En qué circunsctancias te solés bloquear? ¿Qué haces y que dejas de hacer cuando estás así? ¿Cuando necesitaste salir del bloqueo, qué estrategias has usado?
encontrar las palabras que no sabías que buscabas
Atrás, adelante, arriba y abajo de ese bloqueo, hay un contexto. Ninguna emoción es “un caso aislado”. Andar con el piloto automático más o menos encendido, nos ayuda a seguir funcionando, pero la cotidianeidad tambien está hecha de momentos que nos sacan a los tumbos de la “calma”. Una perdida, un cambio, un dolor o un amor profundo nos atraviesa y nos deja sin palabras, nos desparrama como una ola y nos deja sin arriba ni abajo.
Quizás ultimamente los memes vienen aportando mucho material sintetico para leer realidades o compartir experiencias. Pero desde que volví a leer libros por placer, las historias en las que más resueno, las palabras que buscaba las encuentro en los libros.
Me ha pasado con los miedos durante la pandemia por ejemplo, con mis amigas leimos varias autoras -latinoamericanas, migrantes- que en tono de terror o thriller, ponían en palabras sensaciones, pensamientos y emociones que me resonaban. Me desvelé con Mugre Rosa de Fernanda Trias, leí todo lo que encontraba de Mariana Enriquez, flashié con Cometierra y Miseria de Dolores Reyes y volvía a Córdoba desde Tailandia con Camila Sosa Villada… Pero este mes, leí a María Fernanda Ampuero y me atravesó por completo. No es una lectura fácil la que te voy a recomendar, pero fue una lectura que me resonó profundamente.
¿Qué expresiones artisticas te resuenan ultimamente? Encontraste alguna vez en la literatura palabras que te ayuden a expresar tus propios sentimientos? Me encantaría saber ¿Qué libro/s te han marcado así?
lo que tiene que doler, que duela.
que quizás es lo más humano
Fue discusión de la casa unas semanas atrás por qué leer o no leer historias crudas. Porque abrió todo otro debate como el de leer o no noticias de lo que está pasando en el mundo, discutir o no con quienes pensamos diferente etc… Y acá abro también la conversación, me encantaría saber qué pensás vos. Mientras tanto te cuento porqué para mí Biografía el primer cuento de su libro Sacrificios Humanos vale la pena:
📚 porque es una historia que puso en palabras historias propias y ajenas de la vida migrante, específicamente mujeres, latinas que migramos al norte global,
📚 porque es una historia que me ayudó a dimensionar - exponer violencias que muchas veces aplacamos,
📚 porque es una historia que me atravesó el cuerpo
📚 porque es una historia que te conecta con sentimientos que son difíciles de habitar y solemos evitar: el dolor, la injusticia, la angustia y la rabia.
Si querés leerlo, andá a el chisme que tengo un 🎁 para vos.
No voy a decirte que con tener las palabras para decir o escribir alcanza para que algo deje de doler, porque quizás que duela es lo más sano. Tampoco voy a decirte que hay que si o si atravesar tal o cual duelo, o resolver tal o cual cosa, o hacer tal o cual proceso para “estar bien”.
Nunca te voy a decir “si yo o X puede, vos también”. Pero si alguna vez algo parecido se me escapa… porfa: mándame un zumbido virtual que me desinstale el teclado.
Sí me dan ganas de decirte que cada historia migrante es personal, única y móvil, y un destino elegido, que podés hacer acompañadx.
¿Vos… te llevas con el dolor? Cómo es para vos, ponerlo en palabras? ¿Compartís tus experiencias dolorosas con alguien de confianza? ¿Llevas esas experiencias a el espacio de terapia? ¿Que le pasa a tu cuerpo cuando conecta con el dolor? ¿Y con las injusticias?
Confiar en la Rabia
como motor
Uno de los desafíos que compartimos hoy es fortalecer una mirada curiosa y crítica del contexto y del sistema en el que vivimos, un sistema que muchas veces parece no poner en el centro ni los cuidados, ni el descanso, ni las personas, ni la vida digna.
Pienso que es posible siempre podemos pensar/crear con otrxs una estructura de vida que nos cuide y cuide de lxs nuestrxs, aún con todas las trabas que nos vamos a seguir encontrando. La rabia, la desesperanza, y la bronca pueden ser motores muy potentes ante las injusticias, y es esencial abrazarlas y organizarlas colectivamente. Porque ninguna especie sobrevive en soledad y ningún humano cura sin cuidados.
¿Cómo es para vos una vida que ponga en el centro la vida digna, el descanso, los cuidades? ¿Quienes pueden ser o son tus cómplices? ¿Crees que estos son cuestiones importantes en el trabajo terapéutico?
En mi experiencia, es fundamental imaginar otras realidades, otros futuros, acompañada por una profesional atenta de lo que sucede en el camino.
Como siempre, me encantaría saber si te son útiles las reflexiones, las lecturas que te comparto, te resuenan o simplemente… te acompañan un rato.
Te leo, Saludos, Juli.
PD: no te vayas sin leer…
el chisme
Este mes estuve trabajando en sistematizar todas las cartas que te llegaron de las Olas en este nuevo formato Blog, así estarán más fácil de acceder, siempre que quieras volver o compartirselá a un amigui.
🎁 Especial para miembrxs de lasOlas:
Una guía para acompañar la lectura del cuento.
No podés comprar el libro? Te presto el mío.
